(AFP) – Azerbaijan Airlines informó este viernes que, según datos preliminares, el accidente aéreo del 25 de diciembre cerca del aeropuerto de Aktau, en Kazajistán, se produjo por «una interferencia externa física y técnica», en medio de las especulaciones lanzadas desde Ucrania sobre la responsabilidad de Rusia.
La aerolínea detalló que teniendo en cuenta los «riesgos» que existen, decidió suspender hasta que finalice la investigación del accidente los vuelos a partir de este sábado que partan de Bakú, capital de Azerbaiyán, con destino a los aeropuertos rusos de Mineralnie Vodi, Sochi, Volgogrado, Ufa o Samara.
Por su parte, el Gobierno de Azerbaiyán confirmó la presencia de «rastros de metralla» en el interior del avión, así como «agujeros» en una de las alas y «daños en el fuselaje», según explicó el ministro de Transporte, Rashad Nabiyev.
Asimismo, recalcó que «las conclusiones preliminares de los expertos indican la presencia de interferencias externas» y que «el tipo de arma» que se pudo utilizar «lo determinará la investigación», recoge la agencia Report.
El día de Navidad, un avión modelo Embraer 190 de Azerbaijan Airlines que cubría la ruta Bakú-Grozni se estrelló a tres kilómetros del aeropuerto de la ciudad kazaja de Aktau, dejando 38 muertos y 29 heridos, la mayoría de ellos de gravedad.