AFP
Washington anunció «una modificación del dispositivo militar estadounidense» en la zona de Hasmás ante «la posibilidad de una escalada regional por parte de Irán y sus socios». Tras el asesinato de un líder de Hamás.
También el jefe político de Hamás, Ismail Haniyeh, asesinado el miércoles en Teherán, fue enterrado en un cementerio cerca de Doha, en Catar, donde vivía exiliado, tras un homenaje de miles de fieles.
Irán, Hamás y Hezbolá juraron venganza y acusaron a Israel del asesinato, la misma semana en que un ataque israelí cerca de Beirut mató al jefe militar del movimiento islamista libanés, Fuad Chukr.
Ambos ataques alimentan los temores de una extensión de la guerra entre Israel, por un lado, e Irán y los grupos que apoya en el Líbano, Siria, Irak y Yemen, por otro.
El sábado la representación de Irán ante Naciones Unidas dijo esperar que Hezbolá ataque en «profundidad» el territorio israelí y que no se limite a objetivos militares.
Hezbolá, un movimiento chiíta, aliado de Hamás, ha estado intercambiando disparos con el ejército israelí casi a diario en la frontera israelí-libanesa desde el comienzo de la guerra en Gaza, desencadenada por el ataque sin precedentes del movimiento palestino contra Israel el 7 de octubre.
Ismail Haniyeh, de 61 años, murió por un «proyectil aéreo», según medios iraníes, en una residencia para veteranos en Teherán, tras asistir a la ceremonia de investidura del presidente iraní.
Sin embargo, según el ejército israelí, el único ataque llevado a cabo esa noche en Oriente Medio fue el de Beirut, que mató a Fuad Chukr, a su guardaespaldas y a cinco civiles.
«Castigo severo»
El líder supremo de Irán, el ayatolá Ali Jamenei, amenazó a Israel con un «castigo severo» y el líder de Hezbolá, Hasan Nasrallah, habló de una «respuesta inevitable».
Las ciudades israelíes de Tel Aviv y Haifa «están entre los objetivos», escribió el sábado el diario ultraconservador iraní Kayhan, que predice «dolorosas pérdidas humanas».
Sin embargo, según el Primer Ministro israelí, Benjamin Netanyahu, Israel se encuentra en un «nivel muy alto» de preparación para cualquier escenario, «tanto defensivo como ofensivo».