El Instituto Salvadoreño del Café (ISC), señala que las exportaciones de café sufrieron una caída de un 50.2 % en los primeros cuatro meses de la cosecha 2023-2024.
Los primeros meses suelen ser los de mayor actividad en las fincas, pero los resultados preliminares advierten que el sector caficultor se encamina a un nuevo ciclo de cifras negativas.
Entre octubre de 2023 y enero de 2024, los productores exportaron 44,891 quintales del grano de oro valorados en un poco más de $9.82 millones. En valor monetario, los envíos se contrajeron en $9.9 millones, mientras que en volumen hubo una disminución de 39,628 quintales (un 46.9 %).
Solo en enero, las exportaciones totalizaron $668,252, un 91.3 % inferior en comparación con los $7.6 millones reportados en el mismo mes de 2023.
Según el registro del ISC, el quintal de café se exportó a un precio promedio de $218.89, un 6.2 % inferior a los $233.43 reportados en el ciclo 2022-2023. A pesar de la disminución, se encuentra en mejor posición que el cotizado en la Bolsa de Valores de Nueva York que este año ha fluctuado entre $180 y $190.
Los futuros del aromático cotizados a través del Contrato C se han visto sacudidos por los riesgos en la cosecha de Brasil, el mayor productor del café arábica, debido a una severa sequía. También ha afectado el debilitamiento del real brasileño ante el dólar, que provoca que los exportadores aumenten la oferta y reduzcan el precio. La caída en las exportaciones se explica, en parte, a que la recolección de café se ha reducido un 7 % en los primeros cuatro meses. El ISC documenta que los productores han reportado 702,392 quintales, 51,178 quintales menos que los 753,570 cosechados en el mismo período del ejercicio 2022-2023.
