Editorial

La injerencia que los gobiernos de Estados Unidos han tenido sobre los países del tercer mundo y especialmente de los gobiernos de Centroamérica se está desmoronando. Llego el tiempo en que algunos gobernantes de la región están diciendo un “basta ya”, de pretender obligarnos a hacer lo que ellos quieren.

El último ejemplo de esto lo dio la Presidenta de Honduras, Xiomara Castro, quien por medio de su ministro de Exteriores, Enrique Reina, citó para el próximo lenes 2 de noviembre a la embajadora de Estados Unidos en Tegucigalpa, Laura Dogu para que explique la razón de su injerencia en los asuntos internos del vecino país.

Según ha confirmado el oficialista Partido Libre de Honduras en sus redes sociales, la convocatoria de Dogu se da después de que la Presidenta hondureña, Xiomara Castro, diera esta instrucción al ministro de Exteriores, Enrique Reina.

Enrique Reina cita a las 12: 00 horas (hora local) del día 31 de octubre en carácter obligatorio a la embajadora de Estados Unidos en Honduras, Laura Dogu, para presentar una protesta formal por su injerencia.

La convocatoria se ha anunciado apenas un día después de que la representante diplomática estadounidense en Tegucigalpa trasladara la preocupación de Washington por el trato que se le da en Honduras a los inversores extranjeros.

De esta manera Honduras se suma a la inconformidad de gobiernos de Centroamérica por la injerencia de la administración Biden en los asuntos internos de países amigos. Anteriormente se quejó y sancionó a la embajada estadounidense el Presidente de Nicaragua, Daniel Ortega y anteriormente fue el mandatario de El Salvador, Nayib Bukele, quien dijo que desean tener buenas relaciones con la administración Biden, pero no tolerarán que esta se inmiscuya en los asuntos internos. Qué bueno que esto esté pasando y ojala sea el inicio de una verdadera libertad de los piaes hermanos de Centroamérica, que se ligran del yugo imperial estadounidense.